De la edad media al postimpresionismo.

El arte como un estado del alma

Dijo Marc Chagall que el arte es sobre todo un estado del alma. No es insólito pensar también que tal vez la creatividad, la capacidad de simbolizar, la de construir elaborados sistemas de códigos, o la de desarrollar sofisticados canales de comunicación es, sin lugar a dudas el conjunto de habilidades que distancia más claramente a los seres humanos de todas las demás especies.

Tras la caída del Imperio Romano de occidente a manos de los barbaros, la evangelización cristiana es preocupación fundamental para tratar de sobreponerse al paganismo y perversión que provocaron  la decadencia de Roma. el artista del Medioevo, entonces, concebía  a los hombres  y a los objetos como un reflejo  de una entidad suprema y  trascendente de acuerdo con la ideología dominante, así, el artista, miembro de la comunidad, con los mismos intereses, la sociedad se lo reconoce en su producción, de esta manera las artes van encaminadas a la función religiosa y las funciones de patrocinador las toma la iglesia; a pesar que en un inicio la iglesia veía con recelo a las artes, como idolatría, pronto se dan cuenta del poder de evangelización –sobre todo en la pintura y escultura- y se convierte en su principal promotor.

De esta manera no es el Arte Medieval una labor que aspire a un interés utilitario, la obra se encuentra al margen del beneficio material y es un trabajo espiritualmente productivo, el artista y cliente comparten y aceptan  el contenido religioso que el arte  expresa.

Esta relación varia, a lo largo de los diez siglos de medievalismo, la iglesia pierde esa exclusividad al aparecer la burguesía  y con el poder económico que le permite tener a los artistas otros clientes.
La edad media se divide en Alta Edad Media  y Baja Edad Media.



2.1.1.Características generales de la Alta Edad Media.



2.1.2.Características generales de la Baja Edad Media.